viernes, 3 de diciembre de 2010

Tunden en cantina a edil de Apizaco, Tlaxcala

El presidente municipal Alex Ortiz Zamora, es acusado de los delitos de peculado, abuso de autoridad y desvío de recursos públicos por 32 millones de pesos.

Le llueve sobre mojado al suspendido alcalde panista de Apizaco, Tlaxcala, Alex Ortiz Zamora, ya que como resultado de una riña de cantina terminó como “Santo Cristo”; su relevo en la administración municipal, Ayax Domínguez Corona, consideró que el servidor público acusado de los delitos de peculado, abuso de autoridad y desvío de recursos públicos por 32 millones de pesos, además de juzgado, debe ser expulsado de las filas del blanquiazul, por su mal ejemplo.

Fuentes fidedignas revelaron que Ortiz Zamora nuevamente pretendió sabotear un ordenamiento del Congreso del Estado e impedir que los integrantes del cabildo de Apizaco, tomaran protesta como presidente municipal propietario al primer Regidor, Ayax Domínguez Corona, y para ello invitó a los integrantes del consejo a parrandear.

Y es que, por segunda ocasión filtraron información al polémico panista sobre la suspensión definitiva del amparo número 1890/2010 que había promovido ante el Juzgado Primero de Distrito en el Estado, contra la suspensión de funciones como presidente municipal, cuyo acuerdo fue aprobado por el Pleno del Congreso local el pasado 25 de noviembre, a fin de que el servidor público enfrente cinco denuncias penales por los delitos de abuso de autoridad , peculado y desvío de recursos públicos por 32 millones de pesos.

Al ser informado de la suspensión de dicho amparo judicial, y que el Congreso local ordenó dar cumplimiento al acuerdo y en consecuencia tomar protesta a Domínguez Carmona como presidente municipal propietario, y para evitar la disposición, Ortiz Zamora se llevó de parranda a los integrantes del cabildo apizaquense.

De ahí que el secretario Parlamentario de la 59 Legislatura local, Eloy Hernández Fierro al trasladarse al ayuntamiento de Apizaco, para dar cumplimento a la disposición, no encontró a los integrantes del cabildo; sin embargo, el representante del Congreso, optó por pegar en las puertas de las oficinas, copia de la disposición asentada en el oficio 1195 a efecto de que le dieran cumplimiento.

De acuerdo a testigos, quienes por temor a ser objeto de represalias omitieron identificarse, aseguraron que la parranda de Ortiz Zamora y los integrantes del cabildo, inició en la casa de uno de ello, ubicada en la comunidad de Santa María Texcalac.

Entrados en las copas, los servidores públicos decidieron continuar con la parranda y se trasladaron a la cantina “Viky” ubicada en la ciudad rielera; estando en el centro de diversión, Ortiz Zamora tuvo la necesidad de acudir a los sanitarios, en donde se tropezó con la horma de su zapato, con un vendedor ambulante a quien en días pasado, supuestamente, en un operativo elementos policíacos lo despojaron de su mercancía.

Envalentonado por el alcohol, supuestamente el comerciante echo en cara al aún alcalde panista el atropello del que fue víctima por parte de los uniformados a quienes ordenó desalojar a los comerciantes de las calles de la ciudad; tras una discusión acalorada, el comerciante dio rienda suelta a su indignación y propino una golpiza al panista, quien logró escapar, después de que quedó como “Santo Cristo”.

Cabe señalar que en los pasillos de la alcaldía rielera, se asegura que Ortiz Zamora acostumbraba ganarse la voluntad de los integrantes del cabildo, con invitaciones a parrandas que presuntamente fueron solventadas con recursos del erario.

Hay que recordar que además de la cinco denuncias que el Órgano de Fiscalización Superior (OFS) interpuso en la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), por los delitos de abuso de autoridad, peculado y desvío de recurso públicos por 32 millones de pesos contra Ortiz Zamora, el panista enfrenta una sexta demanda ante la Fiscalía Especializada en Delitos contra Periodistas de la PGR, por los supuestos delitos de privación ilegal de la libertad, abuso de autoridad, golpes, injurias y los que resulten -hechos asentados en la AP 416/2010-2 -, interpuesta por el comunicador Pedro Morales González.

Además de responder a las autoridades judiciales estatales y federales, por dichos delitos, el alcalde cesado tendrá que solventar más de 500 inconsistencias que el OFS, encontró en sus cuentas públicas correspondientes al ejercicio fiscal del 2008 y 2009, las cuales fueron reprobadas por el Pleno del Congreso local.

Ante esta situación Domínguez Corona será quien funja como presidente municipal propietario de Apizaco, hasta el 14 de enero del 2011, cuando concluye constitucionalmente el periodo de la administración municipal.

Derivado de esta situación, el nuevo edil sostuvo que son reales las irregularidades en la administración pública municipal que encontró el Congreso local a través del OFS, “así que por respeto a los ciudadanos debe haber justicia”.

Aunado a ello, consideró prudente que el PAN tome cartas en el asunto, y proceda a expulsar a Ortiz Zamora de sus filas, a fin de evitar más afectaciones a la preferencia electoral.

Sin embargo, el gobernador panista Héctor Ortiz Ortiz, indicó que antes de que su partido expulse a Ortiz Zamora, se debe esperar el fallo de las autoridades judiciales, toda vez que no se puede prejuzgar si no se tienen todos los elementos de culpabilidad.

“Hay que tener elementos de una y de otra parte, para poder establecer un juicio (…) nunca se puede dar un juicio o un veredicto, con la opinión de un solo lado, entonces hay que mirar los dos ángulos; hay que escuchar las expresiones y justificaciones que tenga que dar el ex presidente municipal, y entonces ya emitir una decisión”, concluyó el gobernante.

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