México deberá importar en este 2011 unas 12 millones de toneladas de maíz, a causa de la ola de nevadas que acabó con los graneros del norte en este inicio de año.
Esas estimaciones divulgadas por la Asociación Nacional de Empresas Comercializadoras (ANEC), cuyo director Víctor Suárez, se refirió a las graves pérdidas ocasionadas por las heladas en Sinaloa, así como en los estados de Sonora, Tamaulipas, Chihuahua y Durango.
El líder de ese gremio puso en duda la solución que pueda aportar el plan emergente de resiembras aprobado por el gobierno, al afirmar que no hay suficiente semillas y agua para alcanzar la producción que se requiere.
Apuntó Suárez Carrera que tan sólo en esas cinco demarcaciones norteñas sufrieron perjuicios alrededor de 600 mil hectáreas de maíz, 300 mil de sorgo, 200 mil de frijol y cien mil de trigo, que se traducen en una pérdida de más de 6.5 millones de toneladas de granos.
Consideró que con el programa oficial de recuperación de sembradíos, que incluye además los estados de Oaxaca (sur del país) e Hidalgo (centro) difícilmente se podrán recobrar 1.5 millones de toneladas de maíz, lo que va a ocasionar un alza en las importaciones y en el precio del grano.
Por su parte, Raúl Pérez, secretario de organización de la Alianza Campesina del Noroeste, coincidió en que no es suficiente el plan de resiembra de la Secretaría de Agricultura de 300 mil hectáreas, cuando son más de 800 mil las afectadas en la región septentrional del país.
Mientras tanto, el titular de esa dependencia, Francisco Mayorga Castañeda, descartó la posibilidad de que se registre hambruna, pues en el ciclo primavera-verano 2010 se acopió muy buena cosecha de maíz, de unas 23.5 millones de toneladas.
Dijo que con la resiembra de 300 mil hectáreas de maíz, 150 mil de sorgo y 15 mil de cártamo va a ser posible recuperar la mayoría de las pérdidas con la producción que se espera en el ciclo otoño-invierno.
Esas estimaciones divulgadas por la Asociación Nacional de Empresas Comercializadoras (ANEC), cuyo director Víctor Suárez, se refirió a las graves pérdidas ocasionadas por las heladas en Sinaloa, así como en los estados de Sonora, Tamaulipas, Chihuahua y Durango.
El líder de ese gremio puso en duda la solución que pueda aportar el plan emergente de resiembras aprobado por el gobierno, al afirmar que no hay suficiente semillas y agua para alcanzar la producción que se requiere.
Apuntó Suárez Carrera que tan sólo en esas cinco demarcaciones norteñas sufrieron perjuicios alrededor de 600 mil hectáreas de maíz, 300 mil de sorgo, 200 mil de frijol y cien mil de trigo, que se traducen en una pérdida de más de 6.5 millones de toneladas de granos.
Consideró que con el programa oficial de recuperación de sembradíos, que incluye además los estados de Oaxaca (sur del país) e Hidalgo (centro) difícilmente se podrán recobrar 1.5 millones de toneladas de maíz, lo que va a ocasionar un alza en las importaciones y en el precio del grano.
Por su parte, Raúl Pérez, secretario de organización de la Alianza Campesina del Noroeste, coincidió en que no es suficiente el plan de resiembra de la Secretaría de Agricultura de 300 mil hectáreas, cuando son más de 800 mil las afectadas en la región septentrional del país.
Mientras tanto, el titular de esa dependencia, Francisco Mayorga Castañeda, descartó la posibilidad de que se registre hambruna, pues en el ciclo primavera-verano 2010 se acopió muy buena cosecha de maíz, de unas 23.5 millones de toneladas.
Dijo que con la resiembra de 300 mil hectáreas de maíz, 150 mil de sorgo y 15 mil de cártamo va a ser posible recuperar la mayoría de las pérdidas con la producción que se espera en el ciclo otoño-invierno.
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