El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) advirtió sobre los efectos nocivos que pueden generar en la población las altas temperaturas, como la insolación, conocida también como golpe de calor. Miguel Angel Núñez, director de Comunicación Social de la delegación Tlaxcala del IMSS, señaló que, ante la presencia de altas temperaturas que se registran en la entidad, "se exhorta a la población a tomar medidas preventivas para evitar este padecimiento".
Explicó que el golpe de calor tiene como principales consecuencias la fatiga, calambres, taquicardias, náusea, vómito, deshidratación, desorientación, somnolencia y convulsiones. Agregó que las personas más vulnerables a estos efectos son los niños menores de seis años de edad y los adultos mayores de 60 años, por lo que en caso de que registren algún padecimiento deben ser atendidos inmediatamente. Expuso que de no atenderse oportunamente, "el afectado puede presentar daño permanente en el cerebro, corazón, pulmones, riñones e intestino, y en casos extremos propiciar estado de coma, discapacidad permanente o la muerte".
Núñez refirió que de acuerdo con la Coordinación Delegacional de Control Epidemiológico del IMSS, este padecimiento provoca la descompensación del organismo, "la temperatura corporal aumenta rápidamente, el mecanismo del sudor falla y el cuerpo pierde la capacidad de enfriarse". Por la insolación, la temperatura corporal "puede llegar a los 41 grados centígrados, en 10 o 15 minutos, la piel se enrojece, permanece caliente, seca y sin sudor, pulso rápido y fuerte dolor de cabeza". Quienes también están expuestos al golpe de calor son las personas que practican deportes por largos periodos bajo el sol o realizan actividades cotidianas en ambientes con altas temperaturas, así como quienes usan algún tipo de medicamento para controlar la presión alta.
También las personas con sobrepeso u obesidad, o quienes toman antigripales o anticonvulsivos corren mayor riesgo de padecerlo, expuso. Por ello, recomendó que "hay que evitar exponerse mucho tiempo al sol, aumentar el consumo de agua natural y si no hay manera de evitar estar expuesto al sol, hay que utilizar sombrero o sombrilla, y si se tiene la posibilidad, utilizar bloqueador solar para proteger la piel de quemaduras".
Indicó que cuando alguien padece golpe de calor debe evitar exponerse al sol y "mantenerse sentado o acostado, tener puesta la menor cantidad de ropa posible, holgada, bañarse con agua templada o fría, colocarse frazadas o compresas con agua fría y buscar apoyo médico inmediato". Asimismo, se recomienda permanecer en ambientes templados, tener la casa bien ventilada, si se realiza actividad física, que sea en las primeras horas de la mañana o después de las 18:00 horas, usar ropa ligera y de colores claros, así como consumir líquidos.
Explicó que el golpe de calor tiene como principales consecuencias la fatiga, calambres, taquicardias, náusea, vómito, deshidratación, desorientación, somnolencia y convulsiones. Agregó que las personas más vulnerables a estos efectos son los niños menores de seis años de edad y los adultos mayores de 60 años, por lo que en caso de que registren algún padecimiento deben ser atendidos inmediatamente. Expuso que de no atenderse oportunamente, "el afectado puede presentar daño permanente en el cerebro, corazón, pulmones, riñones e intestino, y en casos extremos propiciar estado de coma, discapacidad permanente o la muerte".
Núñez refirió que de acuerdo con la Coordinación Delegacional de Control Epidemiológico del IMSS, este padecimiento provoca la descompensación del organismo, "la temperatura corporal aumenta rápidamente, el mecanismo del sudor falla y el cuerpo pierde la capacidad de enfriarse". Por la insolación, la temperatura corporal "puede llegar a los 41 grados centígrados, en 10 o 15 minutos, la piel se enrojece, permanece caliente, seca y sin sudor, pulso rápido y fuerte dolor de cabeza". Quienes también están expuestos al golpe de calor son las personas que practican deportes por largos periodos bajo el sol o realizan actividades cotidianas en ambientes con altas temperaturas, así como quienes usan algún tipo de medicamento para controlar la presión alta.
También las personas con sobrepeso u obesidad, o quienes toman antigripales o anticonvulsivos corren mayor riesgo de padecerlo, expuso. Por ello, recomendó que "hay que evitar exponerse mucho tiempo al sol, aumentar el consumo de agua natural y si no hay manera de evitar estar expuesto al sol, hay que utilizar sombrero o sombrilla, y si se tiene la posibilidad, utilizar bloqueador solar para proteger la piel de quemaduras".
Indicó que cuando alguien padece golpe de calor debe evitar exponerse al sol y "mantenerse sentado o acostado, tener puesta la menor cantidad de ropa posible, holgada, bañarse con agua templada o fría, colocarse frazadas o compresas con agua fría y buscar apoyo médico inmediato". Asimismo, se recomienda permanecer en ambientes templados, tener la casa bien ventilada, si se realiza actividad física, que sea en las primeras horas de la mañana o después de las 18:00 horas, usar ropa ligera y de colores claros, así como consumir líquidos.
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